EXPLORANDO CABRONES

Cinco himnos, cada uno a su manera, han sido defendidos con un rigor casi académico. Desde la filosofía generacional de Viejoven, pasando por la sabiduría callejera de La Mandanga, el exotismo ochentero de Walk Like an Egyptian, la declaración de amor eterno de Nada cambiará mi amor por ti y la euforia desatada de Mi Gran Noche.Ahora, solo uno puede alzarse con el título de Cabronazo Supremo. ¿Quién ha convertido lo indefendible en arte? ¡Vota por el campeón de la vergüenza musical!